Las mesas modernas no son como las que se podían encontrar, sin ir más lejos, hace una década. El sector ha evolucionado considerablemente, explorando diseños más modernos, pero también distintos materiales y, sobre todo, ajustándose a los lugares donde se usan. Si nos centramos en las mesas para empresas, ahora más que nunca hay que tener en cuenta ese carácter flexible de las oficinas que compaginan el trabajo presencial con el remoto, o aquellas que apuestan por dar amplitud a sus trabajadores.
Posibilidades de lo más diversas que deben tener en cuenta los distintos espacios que hay en una compañía. Sea para un pequeño cubículo, para un escritorio de buen tamaño, para una reunión entre empleados o incluso para la sala donde tomar el café y desconectar. Hace falta variedad, pero siempre saber apostar por lo mejor. Por eso, nos hemos apoyado en el catálogo de Mesas para oficinas de Ofiprix, una compañía especializada en material de oficina que ha sabido acertar con el abanico de mesas para profesionales.
Mesas para salas de reuniones
En las salas de reuniones hacen falta mesas de dimensiones considerables, pensadas para poder dar espacio suficiente a un buen grupo de personas y que estas puedan contar con sitio suficiente para moverse y no sentirse presionadas. Lo primero que podemos destacar en este campo es que las estructuras de aluminio son las grandes favoritas, tanto dentro como fuera de este terreno, por su robustez y resistencia, amén de por su ligereza.
Es cierto que las mesas para salas de reuniones no necesitan moverse mucho, pero que cuenten con esta posibilidad en caso de tener que cambiar la distribución de la sala siempre es algo bienvenido. Aquí, modelos como la mesa Kubika con triple soporte para aguantar bien toda la extensión de madera, que se prolonga por casi 4 metros de longitud, son bastante aconsejables.
Se deben buscar mesas que den espacio suficiente para un mínimo de entre 6 y 8 personas, para salas de juntas o despachos de reuniones. Aunque siempre se pueden combinar varias mesas de menor tamaño, el resultado final siempre es mejor con una mesa específica para estas situaciones, principalmente porque no suma más patas que puedan impedir que los asistentes se sienten con normalidad.
En resumidas cuentas, se ha de buscar algo con una longitud igual o superior a 3 metros, ya que cada persona puede necesitar entre 1 y 2 metros a su alrededor. Asimismo, es aconsejable un buen conjunto de soportes en la estructura principal para evitar pandeos y garantizar que la mesa pueda soportar suficiente carga.
Mesas plegables para cualquier espacio
La opción ideal para los espacios pensados para usos diversos, o incluso para oficinas y empresas que están empezando a dar sus primeros pasos y todavía tienen que terminar de orientar su distribución. En este frente, las prioridades son claras: hace falta algo que sea fácil de mover, que pese poco y que, por supuesto, pueda plegarse para quedar recogido en caso de no utilizarse.
¿Recomendaciones? Las mesas Flip o las Nomada, abatibles, plegables y con ruedas totalmente rotatorias en sus patas, dándoles así la movilidad necesaria para colocarse en cualquier puerta y guardarse si hiciera falta. Sus precios son notablemente superiores a las mesas cuadradas simples, pero ganan en versatilidad al poder moverse con total facilidad por cualquier parte de la oficina.
La combinación de materiales es clara: madera y aluminio. Volvemos a escoger la anterior porque ofrece los mejores resultados tanto en ligereza como en resistencia, algo todavía más importante con este tipo de mesas, ya que van a estar en movimiento y poniendo a prueba continuamente sus mecanismos de plegado.
Mesas de escritorio
En lo que respecta a mesas de escritorio, lo cierto es que las posibilidades son bastante mayores. Se pueden escoger modelos con o sin fondo, en función de si hay cables que se quieran ocultar o no, aunque lo más aconsejables son mesas con hoquedades en su panel superior, ya que permiten el paso del cableado de equipos informáticos en caso de haberlos (algo habitual en una oficina).
Se puede optar por las formas sencillas o, también, por las mesas de escritorio en «L», que dan más espacio a quienes las usan o incluso se pueden aprovechar para montar dos puestos sobre una misma superficie a la vez que se aprovechan los rincones de la oficina. Los acabados, ciertamente, pueden ser de cualquier tipo ya que hay variedad suficiente como para dar con algo que encaje perfectamente con la línea estética del entorno de trabajo.
Hay modelos en color negro, metálico, con superficie de madera o combinaciones de todo lo anterior. Es importante volver a recordar aquí la importancia de una estructura sólida y resistente, aunque no es tan necesaria la ligereza com oen apartados anteriores. Estas mesas no suelen moverse, por lo que no es necesario recurrir al aluminio en busca de facilidad de movimiento.
Sea como fuere, en caso de querer más opciones para explorar, es posible consultar más mesas de oficina en Ofiprix.