Las consecuencias de la escaramuza entre bandas juveniles el último día de las fiestas de Alcalá de Henares tienen vertiente política. El PP de la capital española busca que Mercedes González, la encargada del Gobierno en la capital española, acepte sus responsabilidades y pretende aprovechar todas y cada una de las ocasiones que se le presenten para desgastar su figura. La administración de la seguridad en la urbe complutense se ha transformado en un arma arrojadiza para los populares, que procuran forzar una comparecencia pública de González en el Parlamento regional.

Le solicito que sea valiente, que acepte su responsabilidad y que nos explique a los madrileños qué es lo que falló”, asegura Judith Piquet, miembro del Congreso de los Diputados popular en la Reunión de la capital española y aspirante al Municipio de Alcalá de Henares. Se refiere esta parlamentaria a una iniciativa que ha registrado el Conjunto Parlamentario Popular a fin de que la encargada del Gobierno comparezca en el Parlamento regional en las próximas semanas. Dicha solicitud termina de ser calificada por la Mesa de la Reunión, por lo que podría transformarse en una realidad para González, no obstante, las comparecencias pueden ser encargadas por otras personas por lo que su presencia no está garantizada en ningún caso.

Conforme Piquet, los altercados podrían haberse eludido con una mayor dotación de recursos humanos y materiales, como la habilitación de detectores de metales y de un mayor número de cámaras de videovigilancia. Además de esto, critica un aspecto específico que, a su juicio, fue determinante: la ausencia de Unidades de Intervención Policial, asimismo conocidos como “agentes antidisturbios”.

Por su lado, Mercedes González ha asegurado en lo que se refiere a los altercados que la actividad de bandas en Alcalá está desactivada y que hubo más policías en estas Ferias. «Por el momento no podemos aseverar rotundamente que sea un enfrentamiento entre bandas. No me cabe duda de que durante estos días los policías dilucidarán los hechos. Ahora se están generando las identificaciones y no me cabe duda que se procederá a las detenciones», apuntó en conferencia de prensa.

Tras Alcalá, la encargada “rectifica”

En las fiestas de otros ayuntamientos está corrigiendo, pone los medios y está activando las juntas locales de seguridad. Además de esto, ya no ha vuelto a decir que las bandas juveniles están desactivadas por el hecho de que sabe que los altercados sí fueron provocadas por bandas juveniles violentas”, critica Piquet, que comprende que González “debe aceptar sus responsabilidades” por la “pésima gestión” a lo largo de las fiestas de Alcalá. Agrega que el regidor socialista Javier Rodríguez Palacios «no dio la cara» a lo largo de las treinta y seis horas siguientes, algo que «no merecen» los vecinos de la localidad.

El razonamiento sobre la «rectificación» lo basa Piquet en los propios datos que ha aportado la Delegación del Gobierno. A lo largo de los 5 días “más sensibles” de los festejos, se desplegaron un total de doscientos sesenta y uno agentes entre Policía Nacional y Policía Local; y específicamente, la noche de la escaramuza estuvo observada por unos ciento veintiocho oficiales: cincuenta y nueve de la comisaría de Alcalá, quince de la Unidad de Prevención y Reacción y cincuenta y cuatro agentes municipales.

En este punto, apunta la miembro del Congreso de los Diputados a la comparativa entre los efectivos preparados para Alcalá y los designados para las fiestas de otros ayuntamientos de la zona. Así, unos seiscientos veintidos efectivos de Policía Nacional participan en el dispositivo de seguridad de Alcorcón, cuyas fiestas patronales empezaron el pasado sábado y se alargarán hasta el once de septiembre. Además de esto, van a contar con un refuerzo de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), destinada a la prevención, mantenimiento y, en su caso, restablecimiento del orden y la seguridad ciudadana.

En Pozuelo de Alarcón, con una población mucho menor a la de Alcalá, las fiestas cuentan con un dispositivo de doscientos setenta efectivos a lo largo de los 8 días de celebraciones, aparte de que asimismo tienen libre un refuerzo de policías de la UPR. A su vez, en Aranjuez el número de agentes que han velado por la seguridad ha sido de ciento cincuenta y ocho, al tiempo que en San Sebastián de los Reyes, la cantidad ha ascendido a los novecientos quince miembros de la Policía Nacional y Local.

Para la miembro del Congreso de los Diputados popular, estas cantidades suponen una prueba para aseverar que tras los incidentes de Alcalá de Henares, la encargada del Gobierno en la capital española “ha rectificado” y ha mejorado de forma substancial los diferentes dispositivos de seguridad: “Como el Gobierno de Sánchez, solo acierta cuando rectifica”.

Un discute “cargado de bulos”, conforme González

«Alcalá hace ya tiempo, como toda la zona del Corredor, sí tuvo actividad de bandas, al lado de Torrejón, mas justo hace un año se dieron operaciones que generaron muchas detenciones y ahora la actividad de bandas está absolutamente desactivada. En Coslada sí, mas con carácter precautorio. Tenemos constancia de que no son bandas del ayuntamiento, sino más bien de fuera de Alcalá». Con estas palabras arguye la encargada del Gobierno que el dispositivo de seguridad fue “dimensionado” y acorde a las necesidades del acontecimiento.

Sobre las críticas al operativo policial, ha querido «finalizar este discute estéril cargado de bulos» con cifras. Específicamente, el despliegue a lo largo de la noche en la que tuvieron sitio los hechos era de ciento veintiocho policías , cuando en exactamente la misma jornada en dos mil veintiuno fue de setenta y cinco efectivos (veintidos de la comisaría, quince de la UPR y treinta y ocho agentes municipales). Esto es, para González el aumento de cincuenta y tres agentes para estas fiestas es una prueba de que sí hizo una buena administración.

En este punto, cabe rememorar que, por el momento, el único detenido por la policía a lo largo de los altercados ocurridos en las fiestas de la localidad madrileña fue un joven de diecinueve años, perteneciente a la banda latina de los Trinitarios.

Los acontencimientos de Alcalá

Las fiestas de Alcalá de Henares terminaron con una batalla campal que se comenzó con una riña en una de las casetas y que se saldó con 4 agentes de la Policía Nacional heridos por policontusiones, un detenido por un delito de desórdenes públicos, furgonetas destrozadas y contenedores quemados.

Los graves altercados que ocasionaron el pavor a los vecinos tienen su origen a las trescientos treinta horas de la madrugada con una reyerta tumultuaria que se comenzó en la caseta situada en la Puerta de Alcalá. Los policías se aproximaron a quienes participaban en la riña y padecieron lanzamientos de piedras, botellas y objetos concluyente. Los agentes consiguieron hacer una barrera online para avanzar mas los participantes consiguieron exceder la línea.

En ese instante, se decidió desocupar el circuito ferial y se paró la música. Los altercados alcanzaron la Plaza de la Juventud de Alcalá, donde a esa hora se festejaba un macrobotellón. Cuando los agentes se hallaban en las cercanías, los jóvenes empezaron a lanzar piedras, leños -al estar un río en las cercanías-, vallas y otros objetos. Aun, llegaron a montar una barricada en una glorieta con quema de contenedores. Los agentes consiguieron esparcir a los jóvenes y les condujeron a la estación de Renfe para eludir nuevos incidentes. El operativo se dio por concluido a las 8 de la mañana de este domingo.

Merced al Plan de Seguridad incorporado por Policía Local, Policía Nacional y Protección Civil, se realizó la evacuación ordenada del circuito ferial en menos de veinte minutos, debiendo actuar frente a la intensidad de escaramuzas y el lanzamiento de objetos por la parte de ciertos individuos.