La jugada no semeja haberle salido bien a Pedro Sánchez. Las elecciones generales del diez de noviembre han dado como campeón al PSOE (Partido Socialista Obrero Español), que repite como fuerza más votada tras los pasados comicios del veintiocho de abril, si bien con menos apoyo electoral con ciento veinte miembros del Congreso de los Diputados (ha perdido 3 escaños y setecientos sesenta votos en apenas unos meses). Las primordiales formaciones de la izquierda asimismo han experimentado una ligera bajada de escaños y, nuevamente, los socialistas van a deber llegar a pactos con otros partidos para poder conformar un Gobierno.

Con el veintiocho por ciento de los votos cosechados por el Partido Socialista Obrero Español, el partido dirigido por Pedro Sánchez prosigue sin sumar escaños suficientes para regir a solas y el PP y Vox han recortado distancias sensiblemente.

Pedro Sánchez, recibido a voces de «¡presidente!, ¡presidente!»; «con Casado, no» y «con Iglesias, sí», ha empezado dando las gracias por la participación en estas elecciones. Un valor que esta vez se ha ubicado en el sesenta y nueve con ochenta y siete por ciento, frente al setenta y uno con setenta y seis por ciento del 28A.

Pedro Sánchez comparece en frente de la sede del Partido Socialista Obrero Español en calle Ferraz. (Foto: Partido Socialista)

Más tarde, el líder socialista ha reiterado que «nuestro proyecto político es formar un Gobierno estable» y ha asegurado que «esta vez sí o bien sí vamos a lograr un Gobierno progresista». Para esto, ha anunciado que va a llamar a todos y cada uno de los partidos «salvo a aquellos que se autoexcluyen de la convivencia y siembran el alegato del odio y la antidemocracia» Además, Sánchez ha tratado de hacer un llamamiento a todas y cada una de las formaciones políticas «pues deben actuar con esplendidez y con responsabilidad para desbloquear la situación política en España». A lo largo de su alegato, se ha mostrado enfadado y tenso y ha pedido en múltiples ocasiones a los asistentes que le dejasen charlar.

Unidas Podemos, segunda fuerza del bloque de la izquierda

Por su lado, Unidas Podemos ha sido la segunda fuerza política del bloque de izquierdas en conseguir los mejores resultados. Ubicada como cuarta fuerza en estas elecciones, ha logrado veintiseis escaños, lo que supone una bajada de 7 desde las precedentes elecciones. Con un nueve con ochenta por ciento de votos, el partido de Pablo Iglesias se procurará postular nuevamente como apoyo de Gobierno para Pedro Sánchez, si bien su peso se ha visto meridianamente disminuido en estos últimos comicios y no va a ser suficiente para formar Gobierno.

En su aparición para valorar los resultados, Pablo Iglesias ha mentado que «se duerme peor con más de cincuenta miembros del Congreso de los Diputados de la extrema derecha que con ministros y ministras de Unidas Podemos en el Gobierno». De este modo, ha mencionado a la negativa de Sánchez para formar Gobierno en alianza con Unidas Podemos tras los pasados comicios como causante de la entrada de la extrema derecha como tercera fuerza política.

Sin embargo, Iglesias ha reiterado el apoyo del partido a Pedro Sánchez para «edificar un Gobierno que ponga freno al avance de la extrema derecha». Para esto, ha citado, van a ser esenciales los artículos sociales de la Constitución De España.

La entrada reservada de Más País

Comparecencia de Íñigo Errejón en la sede de Más País. (Foto: Más País)

Tras la capacitación morada se ha ubicado ERC, con trece escaños y un tres con sesenta y uno por ciento de votantes. Más País, por otra parte, ha conseguido solo 2 escaños con un uno con treinta y cinco por ciento de votos en su candidatura conjunta con Equo. Esto, en unas elecciones «que han sido el resultado de una irresponsabilidad exorbitante», conforme su líder, Íñigo Errejón.

En su valoración de los resultados, el aspirante de Más País ha apelado a la responsabilidad de las diferentes formaciones políticas y ha señalado que «en España hay una segunda ocasión a fin de que se conforme un Gobierno progresista». Una ocasión que, según él, no se debe desperdiciar, puesto que estas elecciones ya han supuesto «un aviso de lo que puede ocurrir si los intereses particulares se prosiguen anteponiendo a los intereses del pueblo de España».

Con todo, desde este lunes los diferentes líderes de los partidos deberán empezar a ponerse en contacto para llegar a unos pactos inevitables a fin de que la llegada de un Gobierno terminante resulte posible. Mientras,continúa la situación de bloqueo, fruto de una realidad política que se presenta poco a poco más polarizada en el campo nacional.