La Comunidad de Madrid se ha convertido en un punto de referencia para la digitalización y la innovación tecnológica en estos últimos años, algo que ha reducido a niveles mínimos la brecha digital entre generaciones. Además, las administraciones públicas colaboran estrechamente con el sector privado para seguir impulsando una serie de medidas que sigan avanzando en esta dirección, todo ello con el objetivo de seguir apostando por la democratización de acceso a Internet.
Los dos puntos clave tienen que ver con los usuarios mayores de 55 años y con las zonas rurales, ya que tradicionalmente han ido un paso más atrás en nuestras sociedades a la hora de sumarse a las transformaciones tecnológicas. Sin embargo, estos problemas podrían quedar resueltos en un corto periodo de tiempo, gracias a medidas que fomentan una formación específica en este campo y a avances tecnológicos como las redes 5G.
El último Plan de Capacitación Digital consta de 21 medidas que pretenden impulsar las habilidades informáticas fuera de los principales núcleos urbanos, haciendo especial atención a las personas mayores y sin perder de vista la colaboración público-privada. De este modo, la capital española seguirá siendo un ejemplo tanto a nivel nacional como continental, ganándose a pulso el reconocimiento como uno de los centros tecnológicos más importantes del sur de Europa.
Una gran oportunidad para el tejido empresarial
Por otro lado, no podemos pasar por alto que este esfuerzo para reducir la brecha digital tiene un impacto directo en el tejido empresarial, especialmente en aquellos sectores que llevan años adaptando su contenido a Internet. Esto permite que plataformas de streaming como Netflix generen cada vez más contenido audiovisual dedicado a este público, que las ventas que proceden del comercio electrónico se multipliquen o que el eGaming siga aumentando el número de usuarios.
De hecho, cada vez son más personas las que se deciden a jugar a la ruleta, ya que pueden acceder a este título de forma gratuita con la única condición de registrarse previamente. Además, podemos encontrar hasta cinco modalidades diferentes, algo que vuelve a poner de manifiesto el rápido desarrollo que ha tenido el ocio digital durante la última década.
Si se mantiene esta tendencia tanto en las zonas rurales como en las generaciones mayores, todo apunta a que el número de usuarios que utilizan Internet en la Comunidad de Madrid aumentará con mucha rapidez. Esto supone nuevas oportunidades de negocio para las empresas, pero también generará oportunidades laborales deslocalizadas de los municipios con mayor densidad de población.
La colaboración público-privada gana peso
En este punto, la colaboración público-privada es esencial y desde la administración lo tienen claro, así que han lanzado una serie de colaboraciones con empresas del sector digital para tratar de solventar la burocracia. De esta manera, multinacionales como Google o Amazon asesoran a la capital de nuestro país para promover la inversión tecnológica y conseguir que el sector digital entre con fuerza en el organigrama del funcionariado.
Todo esto ayudará todavía más a que en Madrid desaparezca una brecha digital que da sus últimos coletazos, demostrando que con una buena gestión y la inversión necesaria se pueden acometer planes ambiciosos que tengan un éxito rotundo. Eso sí, todavía queda mucho trabajo por hacer, especialmente en un campo donde cada vez se producen más cambios y a una velocidad mayor.