La calle Alcalá en Madrid: un nuevo espacio para los peatones
El Ayuntamiento de Madrid ha llevado a cabo una remodelación en la calle Alcalá, entre Quintana y Arturo Soria, con el objetivo de mejorar la accesibilidad y ampliar el espacio para los peatones. En total, se han invertido 5.5 millones de euros en estas obras.
Este viernes, la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, y la concejala de Ciudad Lineal, Nadia Álvarez, han visitado el tramo de la calle Alcalá comprendido entre la calle de Argentina y la plaza de Ciudad Lineal para comprobar los resultados de esta transformación. Como resultado de las obras, las aceras se han ampliado y se han creado itinerarios que facilitan la circulación autónoma de los peatones. Además, se han añadido más pasos de peatones, mejorando así el cruce de la calle.
García Romero ha destacado la importancia de estas obras, ya que eran muy demandadas por los vecinos de este distrito, especialmente por las personas mayores. Además de mejorar la accesibilidad, también se ha renovado el arbolado con la plantación de 70 árboles nuevos, y se ha actualizado el mobiliario urbano y el alumbrado público, utilizando tecnología ‘led’ para una mayor eficiencia energética.
La renovación de aceras y zonas verdes
Una de las principales mejoras realizadas en la calle Alcalá ha sido la renovación de las aceras y las zonas verdes. La calzada ahora cuenta con una sección similar al resto de la calle, con dos carriles por sentido reservando el derecho al transporte público y el izquierdo para un carril bici. Además, se ha añadido una banda de aparcamiento de dos metros de ancho cuando ha sido posible.
Las aceras han sido renovadas con pavimentos permeables, y se ha realizado una reforestación con nuevos árboles, sustituyendo aquellos que estaban en mal estado. Es importante destacar que esta remodelación de la calle Alcalá ha continuado la actuación realizada en la misma calle, entre la M-30 y la calle de Argentina, siguiendo los mismos criterios estéticos para lograr homogeneidad.
Además de la renovación de las aceras, también se ha llevado a cabo la completa renovación del alumbrado público, utilizando tecnología ‘led’ para una mayor eficiencia energética. Asimismo, se ha actualizado el mobiliario urbano y se ha llevado a cabo la reurbanización de la plaza de Quintana, integrándola mejor con su entorno.
En conclusión, las obras realizadas en la calle Alcalá de Madrid han logrado una notable mejora en la accesibilidad y en el espacio de paseo para los peatones. Esta transformación ha sido muy demandada por los vecinos y supone un avance en la creación de entornos urbanos más amigables y sostenibles.