Es un hecho que las personas mayores suelen tener problemas de movilidad, visión y oído. También es un hecho que esas dificultades suelen provocar que los ancianos se vayan aislando y encerrando en sí mismos, lo que se traduce en un deterioro acelerado de sus facultades cognitivas.

De este tema hemos hablado con los responsables de la residencia pedrezuela, quienes nos han explicado las actividades que realizan sus mayores, con el objetivo de mejorar su condición física, retrasar el envejecimiento cerebral y fomentar sus habilidades sociales.

Ejercicios adaptados y programas de rehabilitación funcional

La Residencia Pedrezuela es una de las más reputadas residencias temporales para rehabilitación madrid. Entre su abanico de actividades de rehabilitación y movilidad para ancianos destacan:

  • La fisioterapia guiada por profesionales especializados en la tercera edad
  • Las rutinas de ejercicios adaptados para mejorar la movilidad

Estas actividades y programas están disponibles tanto para los residentes internos como para aquellas personas mayores que precisen recuperarse tras una estancia hospitalaria prolongada o un traumatismo.

Actividades de estimulación cognitiva

El mantenimiento de la actividad mental es imprescindible para frenar el deterioro cognitivo.

A tal efecto, el abanico de opciones incluye:

  • Juegos adaptados y pasatiempos
  • Terapia musical de grupo

Además, la realización de estas actividades tiene un reflejo positivo en el estado de ánimo de las personas mayores.

Actividades creativas

Se trata de realizar actividades sencillas de dibujo y pintura. Estas actividades tienen beneficios cognitivos, entretienen a las personas mayores y también contribuyen a reforzar su estado anímico.

Actividades de socialización e interacción

Las actividades grupales y las puestas en común son imprescindibles para que los ancianos no tiendan a aislarse y conserven intactas sus capacidades de interacción y socialización.

Existen muchas alternativas, como puedan ser la creación y puesta en común de álbumes de fotos familiares, la exposición de recetas de cocina, los bailes o las audiciones musicales colectivas.

Estas actividades deben reforzarse con salidas a la calle, preferentemente de la mano de sus familias, a fin de que la persona mayor no pierda el contacto con el mundo que le rodea.

Ocio pasivo

Las personas mayores también necesitan sus momentos de ocio pasivo. No se trata de acomodar al anciano durante horas ante un televisor, sino de permitirle que vea su programa favorito, una película interesante o un partido de fútbol.

La televisión, bien manejada, también es un medio para que la persona mayor mantenga intactas sus capacidades cognitivas de comprensión y de atención.

Las visitas familiares regulares y los pequeños obsequios, el complemento necesario

Los esfuerzos realizados por los profesionales de los establecimientos residenciales siempre precisan del refuerzo de la familia de la persona mayor.

Las visitas de familiares y amistades suponen un estímulo adicional para el anciano, mejorando su estado de ánimo, disminuyendo su sensación de soledad y estimulando sus ganas de vivir.

Un detalle importante es el de llevarles, de vez en cuando, un pequeño obsequio o detalle en cada visita.

Una cajita de bombones, un pastel o un frasquito de perfume, son buenos ejemplos de regalos para personas mayores.